LOS NIÑOS DE "EL CAIMITO" SONRIERON.

Después de realizar la recolecta de juguetes en el 1er toque de caridad ¡AY CARAMBA!, fuimos al barrio El Caimito de la Comuna 1 de Palmira, a entregarlos.

Nos encontramos con una situación bastante complicada, pues la alcaldía había donado juguetes, los cuales no habían alcanzado por que personas de otros barrios llegaron al sitio donde se estaban repartiendo y con intimidaciones se llevaron parte de los regalos. Por lo tanto niños del barrio se quedaron sin su navidad pero llegamos nosotros con los reyes, fecha olvidada, y pudimos dibujar de nuevo unas sonrisas... sin olvidar que la caridad no es la solución.

Vino una nueva complicación  los niños que ya tenían regalos querían ser de nuevo participes de la alegría de los otros niños. Sin embargo la situación pudo ser manejada por los vecinos y encargados de la Junta de Acción Comunal, los cuales quedaron muy agradecidos con el gesto de los "rockers" de Palmira y están entusiasmados a continuar con las actividades que se venían realizando en conjunto.

Es oportuno denunciar que la falta de intervención por parte de la alcaldía al problema de las barreras invisibles y la pelea de pandillas esta creciendo sin una solución cercana. La alcaldía y su administración esta consciente de la problemática  pero están interesados en mostrar resultados, por eso van con su PEIS, dan regalos o hacen algún evento publico, toman fotografías y se van sin interesarse la solución o disminución de los problemas de la comunidad.

Esta comunidad necesita planes integrales de salud, empleo, deporte, recreación y educación  Debe ser visibilizada, acogida, recordada y entre otras cosas que no suman en el olvido y la misera a las gentes de estas comunidades que por algún motivo como el destierro y desplazamiento por el conflicto se han visto obligadas a conglomerarse en estas zonas, y al no existir ayudas por parte del estado ni encontrar oportunidades claras en esta sociedad se ven obligadas a entrar en un conflicto que se traslado de lo rural a lo urbano.

Gracias a la comunidad por acogernos, a los que con su ayuda hicieron posible esas sonrisas y seguiremos en pide de lucha trabajando con las "zonas rojas" de la ciudad.